Las lluvias tardías y la intensa sequía que afectó gran parte del país en los primeros meses del año provocaron una disminución significativa en la producción de diversos cultivos, según un análisis del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
El GCMA
informó que la siembra total del ciclo otoño-invierno 2023-2024 disminuyó un 9%
en comparación con el mismo periodo del ciclo 2022-2023. La producción de
granos, hortalizas y frutas cayó un 7% en el mismo lapso.
En
particular, la producción de maíz sufrió una drástica reducción del 33%, el
sorgo disminuyó un 1% y el trigo un 27%. Sin embargo, la producción de frijol y
garbanzo creció un 33 y un 90%, respectivamente.
Entre las
hortalizas, el volumen de producción de calabacita cayó un 8% y el de cebolla
un 4%.
El GCMA
destacó que, a pesar de ser un ciclo más estable, la producción total de
cultivos de ciclo largo, aquellos cuyo periodo vegetativo se extiende más allá
de los 12 meses, registró una caída anual del 3%. Específicamente, la
producción de caña de azúcar disminuyó un 4%, el aguacate un 5% y la naranja un
3%, mientras que el limón aumentó un 3%. La producción de alfalfa se redujo un
4% anual.
Para el
ciclo de primavera-verano, se observó un déficit total en las siembras del 2%.
La siembra de maíz disminuyó un 0.3%, la de sorgo un 14% y la de frijol un 9%,
aunque se registró un crecimiento significativo en las siembras de soya.
El GCMA
señaló que el área sembrada de granos y oleaginosas para el ciclo primavera-verano
disminuyó un 5%, seguido por las hortalizas con una reducción del 10%.
En cuanto al
maíz, se sembraron 4 mil hectáreas menos que el año pasado, una diferencia del
0.3%. La siembra de frijol se redujo en 75 mil hectáreas, un 9% menos que en el
mismo periodo del año anterior.
Las
hortalizas más afectadas por la disminución en la siembra fueron la calabacita,
con una caída del 17%; el chile verde, con un 15%; y la papa, con un 6%. La
superficie destinada al cultivo de cebolla disminuyó un 2% y la del tomate rojo
un 8% frente al ciclo primavera-verano de 2023.
En el caso
de los cultivos ornamentales, la producción de rosa disminuyó un 2%, mientras
que la de crisantemo aumentó un 4%, la de gladiola un 0.3% y la de gerbera un
5%.
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