Como medida de protección al medio
ambiente, este primero de enero entró en vigor la prohibición de la
comercialización, distribución y entrega de plásticos de un solo uso,
también conocidos como desechables, en todos los establecimientos de la capital
del país.
Ante esta disposición, la Secretaría
del Medio Ambiente de la ciudad de México invitó a los niños a sumarse a la
iniciativa, evitando utilizar envolturas de regalos con materiales
desechables.
Para comunicar dicho mensaje, se
publicó un video en el que un grupo de niños se pronuncia a favor de la
prohibición de vasos de plástico, popotes y globos como forma de hacer frente a
la excesiva contaminación del planeta.
“Queridos Reyes Magos, en la Ciudad de
México ya no podemos usar plásticos de un solo uso. Voy a volver a dejar mi
carta en el zapato, y ya no voy a mandar mi carta en globo. He sido un buen
niño, y he ayudado al medio ambiente porque ya no uso vasos de plásticos ni
desechables, tampoco popotes
Además, las y los niños incluidos en el video
señalan que los vasos elaborados con este material tardan 50 años en
degradarse, los popotes 500 años y los globos 450 años.
“Espero recibir mis juguetes, pero
no se les olvide, sin moño ni bolsita”, finaliza uno de los pequeños que
participa en el video creado por el gobierno capitalino.
En las reformas y adiciones de la Ley
de Residuos Sólidos capitalina, publicada el 25 de junio de 2019 en la
Gaceta Oficial de la Ciudad de México, se especifica que: “Estará prohibida
la comercialización, distribución y entrega de productos de plástico de un solo
uso”.
De tal forma, no está permitido el uso de
artículos como globos, popotes, bolsas, platos, vasos, mezcladores, tenedores,
cucharas, charolas, cuchillos y tapas en la CDMX.
Las multas que las autoridades podrían aplicar por
incumplir dicha disposición van de las 500 a 2000 veces la Unidad de Medida y
Actualización (UMA), es decir, de al menos 42,000 a 168,900
pesos aproximadamente.
Pese a la serie de cambios, la autoridad del
medio ambiente sí permitirá la venta y consumo de algunos productos fabricados
a base de materiales compostables, es decir, que son biodegradables hasta en un
90% y un periodo de seis meses.
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